Cinque Terre

HISTORIA Y RESEÑA

Hacer posible, lo imposible

Si tuviera que resumir en una sola frase lo que ha sido para mí el Club El Rincón de Cajicá, no diría apenas que una fuente de placer permanente, un orgullo familiar muy grande o la prueba de que el trabajo de mucha gente alrededor de un sueño común siempre transforma la realidad y logra su objetivo. Diría todo eso, claro, pero sobre todo señalaría que para mí fue la evidencia cierta, a una edad temprana de mi vida, de que no hay imposibles para quien tiene los ideales y le suma suficiente persistencia.
El origen del Club fue, como todos los proyectos que parecen imposibles, una empresa que puso a prueba nuestra paciencia de manera que era difícil anticipar. No solo no contábamos con el dinero necesario para adquirir los predios o para construir el Club, sino que nuestra experiencia en esta materia era limitadísima.
Teníamos claros los principios. Esos son hoy los verdaderos cimientos de El Rincón. Queríamos un lugar en el que existiera un verdadero sentido de comunidad. Buscábamos un club con un campo de golf de talla internacional. Deseábamos un espacio en el que los hijos de socios tuvieran facilidades verdaderas para acceder al Club.
Nada describe de mejor manera la descomunal tarea que nos impusimos como la construcción del campo de golf. Queríamos el mejor de los diseñadores. ¡Vaya ambición! ¡Un puñado de profesionales jóvenes con poco dinero, que apenas si encontraban acceso al crédito necesario para adquirir los terrenos, buscando el mejor diseñador del mundo para que el campo de golf fuera único en el país…! Y, sin embargo, en esa extraña manera en que todo se conjuga para ayudar a los proyectos que cuentan con ganas suficientes, llegamos a Robert Trent Jones luego de una larga búsqueda. Aceptó diseñar nuestro campo. Nos faltaba alguien que trabajara en el terreno. De modo que encontramos a Alberto Serra, un profesional argentino que había trabajado en el Country y que se había ido a Panamá y lo asediamos hasta que aceptó ayudarnos.
Como el campo no avanzaba perdimos socios. Al inaugurar los primeros nueve hoyos tuvimos la primera inundación y allí, también, enfrentamos deserciones. Pero al final logramos lo que soñábamos, y ahí está. Un campo que hoy todavía es señalado como uno de los mejores de Suramérica, un Club que es un verdadero placer para sus socios, una comunidad que todos los días se rejuvenece. Para no ir más lejos, observar las nuevas instalaciones infantiles habla del buen futuro que tiene El Rincón.
Este libro muestra lo que logramos, no los fundadores, sino todos los que cada fin de semana vamos a El Rincón. Cada foto, cada frase, es para mí un recordatorio del impulso inicial que tuvo el Club, el sueño de hacer posible lo imposible. El mismo sueño que los debe empujar a ustedes en los siguientes años de El Rincón de Cajicá. Estoy seguro de que interpreto a cada uno de los fundadores si los invito a todos, en este año de 2007, a que se atrevan a soñar El Rincón del 2057 y a que pongan en ello todo el optimismo, todo el empeño y toda la ilusión de hacer algo nuevo y mejor todos los días para dejarles a las nuevas generaciones.


Emilio Pizano de Brigard



El CLUB EL RINCÓN fue fundado en 1958 por un grupo de ocho amigos que deseaban unirse para compartir su pasión por el golf.

  • Emilio Pizano de Brigard
  • Camilo Samper Santamaria
  • Alberto Vargas Martinez
  • Bernardo Saiz De Castro
  • Álvaro Samper Cadavid
  • Julio Ortega Samper
  • Roberto Pradilla Jaramillo
  • Jorge Castello Salazar


Con esto en mente, no querían hacer el Club en cualquier sitio y fue así como se dedicaron a recorrer toda la sabana de Bogotá en busca del mejor sitio para una cancha de golf. Uno de esos días, los llamó un amigo y futuro socio, Octavio Restrepo, y les informó sobre un terreno de 55 fanegadas ubicado en Cajicá, que iba a ser rematado. Lo revisaron y era definitivamente lo que estaban buscando. Tras conseguir el dinero necesario y después de vencer increíbles obstáculos, lo adquirieron; el valor cancelado fue de $2.700 pesos por fanegada. Este terreno incluía una casa que posteriormente fue arreglada bajo la supervisión de Camilo Samper, con el objeto de que funcionara como sede.

Esta casa todavía existe y en ella el Club tiene una a la “Fundación Casa Vieja”, a través de la cual se ayuda a la región. En el terreno restante después se harían los primeros nueve hoyos. Con el pasar de los años se adquirió más terreno para así alcanzar el área que tiene el Club hoy en día. A punta de hacer almuerzos campestres y de convencer de su sueño a los mejores amigos, los fundadores lograron conformar un grupo suficiente para convocar la primera Asamblea del Club, que fue realizada el 15 de octubre de 1958. A esa fecha se contaba con 79 socios. Fueron elegidos Presidente Emilio Pizano De Brigard y Vicepresidente, Julio Ortega Samper.

Esta casa todavía existe y en ella el Club tiene una a la “Fundación Casa Vieja”, a través de la cual se ayuda a la región. En el terreno restante después se harían los primeros nueve hoyos. Con el pasar de los años se adquirió más terreno para así alcanzar el área que tiene el Club hoy en día. A punta de hacer almuerzos campestres y de convencer de su sueño a los mejores amigos, los fundadores lograron conformar un grupo suficiente para convocar la primera Asamblea del Club, que fue realizada el 15 de octubre de 1958. A esa fecha se contaba con 79 socios. Fueron elegidos Presidente Emilio Pizano De Brigard y Vicepresidente, Julio Ortega Samper.
Como anécdota especial está el hecho de que en ese entonces para todos los socios nuevos se tenía una ceremonia de iniciación, que incluía un “bautizo”. En ésta se usaban disfraces de los Chibchas.

Para lograr una salida por el costado oriental, en 1964 y 1965 se compraron los terrenos necesarios y se construyó una carretera de acceso, con un puente sobre el río Bogotá. En cuanto a los deportes complementarios, en 1962 se construyó la primera cancha de tenis y en 1969 la piscina, que fue cubierta en 1980. En 1966 se construyó la nueva sede del Club y se hizo una gran fiesta. En 1979 se completaron los terrenos del Club con la adquisición de 6 fanegadas al otro lado del río Bogotá. En esta zona se construyeron las canchas de tenis, una cancha de fútbol y un quiosco.



Campo y eventos de golf

Para el diseño del campo averiguaron quién era el mejor diseñador del mundo y fue así como contactaron al inglés Robert Trent Jones, quien cobró US$ 26.000. Ahora el campo ha sido considerado como uno de los mejores cincuenta del mundo. El constructor fue el argentino, experto en estas lides, Alberto Serra. El campo se inauguró en 1963 con cortada de cinta y una gran celebración. En 1980, a raíz de un fuerte invierno, se inundó el campo de golf. Gracias al esfuerzo de varios socios, se logró arreglar antes de celebrar la Copa Mundo, ese mismo año. Este evento fue definitivamente un hito en la historia del Club, no sólo por su importancia a nivel mundial sino porque contó con golfistas de varios países. El éxito de la Copa Mundo fue gracias a la colaboración y trabajo de los socios.
Los expresidentes del Club El Rincón son:

  • Emilio Pizano De Brigard 1957 – 1963
  • Jorge Sanz de Santamaría 1963 – 1967 y 1974 – 1975
  • José Manuel Rodríguez Silva 1967 – 1969
  • Camilo Samper Santamaría 1969 – 1971
  • Manuel Carrizosa Ricaurte 1971 – 1974 y 1985 – 1989
  • Jorge Espinosa Ángel 1975 – 1977
  • Ernesto Uribe Pereira 1977 – 1979
  • Luis Alberto Forero Pombo 1979 – 1982
  • Pablo Gómez Vargas 1982 – 1985
  • Hernando Lobo-Guerrero Martínez 1989 – 1991
  • Albero Pizano de Narváez 1991 – 1994
  • José Guillermo Prieto Gómez 1994 – 1997
  • Rafael De Ureña Gamboa 1997 – 2000
  • Arturo Acosta Villaveces 2000 – 2002
  • Santiago Jaramillo Villamizar 2002 – 2006
  • Ignacio Gómez Arango 2006 – 2008
  • Nicolás Forero Gnecco 2008 – 2011
  • Carlos Guillermo Vila Torres 2011 – 2015
  • Ana María Arrázola Camargo 2015 – 2017
  • Juan Manuel Villegas Vanegas 2017 – Actual


Para el futuro, el Club continuará mejorando su cancha, sus instalaciones y sus sistemas para estar a la altura de los mejores clubes de golf del mundo. Por el otro lado, se debe mantener muy claro que El Rincón es ante todo un club de amigos y es con estos dos principios que avanzaremos durante el siglo XXI.